GABINETE
El derbi granadino de la élite del fútbol sala de categoría juvenil ha cumplido las expectativas creadas en los días previos. Se presumía un partido de alto nivel y máxima tensión, y así ha sido.
Los de la costa necesitaban agarrarse al tren de la liga y los de Alhendín no descolgarse en la clasificación. Visto lo visto en el partido ambos equipos son merecedores de una clasificación holgada en la tabla.
Golpearon primero los visitantes que en apenas dos minutos de tocada la bocina se adelantaron en el marcador. No bajaron la guardia los motrileños y marcaron una presión por todo el campo que acabó por axfisiar a los del BARPIMO hasta conseguir empatar el partido, resultado con el que se fueron a vestuarios.
En los primeros minutos de la segunda parte se repitió el mismo escenario, se adelanta el BARPIMO y le empata el Mutrayil. A partir de ahí dominio alterno hasta llegar a los siete últimos minutos de partido donde los de Alhendín golpearon por tres veces consecutivas para dejar al Mutrayil herido de muerte y el partido sentenciado. En los últimos instantes los costeros consiguieron anotar pero ya sin margen para obrar la remontada.
Un partido más para manifestar que