Breogán Lugo asalta Granada y comprime la lucha por el abismo

El Coviran se ve sorprendido, a partir del segundo cuarto del partido, por un compacto cuadro lucense

REDACCIÓN GRANADA POLIDEPORTIVA / Felipe Bazán

‘Bienvenidos’, como suena a todo volumen el clásico de un rockero granadino, en la megafonía del Palacio de Deportes. Encuentro de altos vuelos el que van a disputar Coviran Granada y Río Breogán Lugo. A las finales se les considera otra cosa, como cuando es la resolución de algo. El ambiente, la tensión, la ilusión, los nervios, las ganas de disfrutar y un largo recorrido de epígrafes que podíamos exponer. La atmósfera de la instalación zaidinera, califíquenla como gusten ustedes. Un partido envuelto en varios envites a la vez, los cuarenta minutos, los cuatro cuartos, la búsqueda del triunfo, el basket-average, todo suma y todo resta. Los rojinegros cuentan con una victoria más que su oponente a día de hoy. Un sábado de lluvia meteorológica y sobre todo, lluvia de sentimiento por el deporte de la canasta. Mucho en juego, sigue el recorrido de la ACB. ¡¡No estamos solos en ningún pabellón!!, como dice el himno.

El salto queda en manos rojinegras, con el primer ataque fallado por Lluís Costa, primera captura ofensiva para los locales, que tampoco aprovecha Cristiano Felicio. Las ganas iniciales se traducen en ansiedad en ambos lados, con alguna precipitación. El serbio Stefan Momirov pone cordura desde el triple, para dar la primera ventaja a los suyos (0-3), transcurridos un minuto y veintiséis segundos. La respuesta de Kwan Cheatham de dos, para abrir boca en los suyos. La defensa muy intensa de Coviran Granada, como demandaba su técnico en la previa. Un robo de Felicio, provoca un contraataque fulgurante de David Kramer (4-3), para la primera ventaja anfitriona a falta de 7:11. El enceste de Ben McLemore, en el bando celeste, fue la mecha que necesitaban los locales, paradójicamente. Muy enérgicos atrás y con una muñeca de dulce del campeón del mundo alemán, con dos aciertos consecutivos desde detrás del 6.75. El estadounidense Cheatham acompañaba en la anotación (12-5).

El técnico de Breogán llamó a filas a los suyos con tiempo muerto a falta de 5:31, ya que el parcial se había ido hasta el 12-2. Un intercambio de canastas a raíz de aquí, con protagonismo de Juan Fernández y Momirov en los celestes y el dúo Jacob Wiley-Kwan Cheatham en los granadinos. El Coviran Granada dominaba en el rebote, incluso el ofensivo con seis capturas pero no aprovechaban los segundos esfuerzos para anotar con solvencia. Justin Robinson acortaba desde el tiro libre y un 2+1 de Anthony Polite estrechaba 16-14 el luminoso, entrando en el último minuto de cuarto. El octavo punto de Cheatham subía a las huestes nazaríes y un triple final de Matas Jogela, recién entrado en pista, dejaban el 18-17.

El mal sueño de segundo cuarto para Coviran Granada fue desde la puesta en marcha del mismo. Anthony Polite vio aro para devolver la ventaja lucense 18-19, que perduró ya durante gran parte del duelo. El Río Breogán movía el balón con fluidez y encontraba siempre el camino del acierto. Los pupilos de Pablo Pin, espesos en ataque y sin chispa en su zona. Robinson y Polite anotaban, incluso corriendo a la contra. El reloj corría sin puntos en los rojinegros y el entrenador granadino solicitó tiempo con 18-23 y restando 6:56 para el receso. La brecha para los visitantes se iba a 0-9 de parcial, enmendada por Cheatham en la jugada siguiente. Tres minutos y veintitrés segundos necesitaron. Los altos porcentajes de tres de Anthony Polite encontraban respuesta en Scott Bamforth desde el 6.75.

El Breogán acudía a los tiros libres, ya que los granadinos andaban cargados de faltas. El ‘2’ celeste seguía con su idilio con el triple y la ventaja se iba a los diez 25-35. El panorama ya era preocupante y se respiraba en el Palacio. El segundo tiempo muerto no se hizo esperar. Los jugadores de ambos equipos acudían con asiduidad al 4.60. Un nuevo acierto desde el triple de Bamforth y un buen tapón de Malik Dimé recortaban a seis, la rémora de puntos, 34-40. El técnico Veljko Mrsic solicita tiempo muerto. Aunque un buen robo defensivo de los granadinos, lo convierte Scott Bamforth al contraataque. El reloj de la instalación deportiva se había parado en 32.5 segundos. Malas decisiones y grietas defensivas en Coviran, lo castigan con rebote ofensivo, canasta de Juan Fernández y triple sobre la bocina de Stefan Momirov 36-45, para irse a vestuarios.

El tercer parcial era un intercambio de ‘golpes anotadores’ hasta su ecuador. Un dinámico Wiley junto a Kramer encontrando penetraciones al aro, acompañados de Lluís Costa, cogían la manija en los locales. Justin Robinson, básicamente yendo al tiro libre, y Matas Jogela penetrando con fluidez. La desventaja para Coviran Granada estaba perenne en la decena. La dinámica parecía variar con dos aciertos seguidos desde el 6.75, de Kramer primero y Bamforth a continuación. El reloj marcaba 5:30 para finalizar el cuarto y el 48-52 de resultado. El escolta alemán, David Kramer, lo tenía claro buscando profundizar hasta debajo del aro. Por el otro bando, Toni Nakic, dorsal ’99’ se sumaba al festival visitante al tiro libre, 23 de 29 al final del envite para Breogán. El arbitraje era muy protestado tanto por el banquillo como por el graderío. Un error en el triple de Christian Díaz para meterse de lleno en el choque, era aprovechado por Sergi Quintela a la contra 52-58. Una nueva pérdida de balón en los nazaríes, no la perdona Justin Robinson desde el triple, para estirar 52-61 la ventaja para su equipo. Pablo Pin, paraba reglamentariamente con tiempo y 2:29 por disputarse. Las dos asistencias espectaculares de Jonathan Rousselle eran culminadas por el brasileño Felicio. Los lucenses seguían acudiendo al 4.60, por medio de Quintela, aunque falla ambos lanzamientos. Los árbitros acuden de nuevo al ‘Instant Replay’ por una posible antideportiva del base nacional de los visitantes. Después de la revisión se confirma. Elías Valtonen consuma los dos tiros libres y posesión para Coviran, fantásticamente aprovechada por Rousselle penetrando hasta el fondo 60-61 y algarabía de nuevo en las gradas zaidineras, con casi lleno en el aforo.

Restan 53.7 segundos y Lugo detiene el choque con TM. El reciente fichaje granadino, Scott Bamforth comete su cuarta falta personal y Juan Fernández convierte sus dos lanzamientos. El base francés de Granada de nuevo intenta llegar hasta la cocina pero es taponado. Posesión local, esta vez Jonathan lo intenta desde el exterior buscando un triple que lo falla. El rebote ofensivo para Cristiano Felicio al que le hacen falta. El carioca con sus 2TL pone el 62-63. Sobre el sonido de bocina y a tabla, Sergi García ‘enchufa’ un ‘triplazo’ 62-66. Todo abierto, en la pelea para los diez minutos decisivos.

El cuarto definitivo ya estaba aquí y un triunfo crucial por decidirse. Breogán yerra su primer intento a canasta. Felicio desde el interior de la pintura acierta. La defensa local no andaba muy ajustada y Polite lanzaba desde el 6.75 con aplomo (64-69). Los rojinegros buscaban respuesta con celeridad desde el triple, también, sin acierto de Valtonen. Los nervios y la precipitación subía enteros, en ambos equipos, por lo crucial del triunfo en juego. Alguna pérdida, aprovechada en los lucenses por Anthony Polite a la contra. En los granadinos, Lluís Costa, con su magia y carácter competitivo, penetraba entre las torres gallegas. La muñeca parecía encogerse en los componentes de Río Breogán, con tres ataques consecutivos desaprovechados. El finlandés Elías Valtonen, sí la enchufaba de tres, cuando restaban 5:03 y le devolvía la ventaja a Coviran Granada (72-71).

Los visitantes fallaban su triple pero el rebote ofensivo para ellos, segundo esfuerzo y triple al canto 72-74. Los locales tenían una nueva pérdida y los colegiados pitaban ‘falta antideportiva’ a Valtonen. Los dos libres convertidos por Justin Robinson 72-76 y posesión para Lugo con 4:07 minutos por delante. La pelota se puso caprichosa y el lanzamiento posterior desde el 6.75 del propio Robinson, le hacía la corbata. En la transición, Lluís Costa corría y penetraba, para un 2+1 de raza. La desventaja local, nuevamente era por la mínima y la esperanza en los más de ocho mil espectadores del Palacio. La quinta falta personal de Elías Valtonen llegaba con 3:34 por jugar. El pívot Juan Fernández, va al tiro libre fallando uno de ellos. La posesión, para los anfitriones. El lanzamiento de Kwan Cheatham no entraba. Una jugada defensiva espectacular de Jacob Wiley taponando, la intentona lucense. Y llega una nueva pérdida de bola, bastante absurda e infantil. David Kramer intenta un pase ‘sin mirar’ y contraataque culminado por Jogela, 75-79 y 2:23 por disputarse. Llega el tiempo muerto de Pablo Pin.

En el saque de puesta en juego, Coviran Granada consume el tiempo para cruzar de campo sin éxito, debido a la presión ejercida por el rival. El Río Breogán recupera posesión, falla en su intento de canasta aunque un rebote ofensivo, clave a todas luces, en un despiste defensivo colectivo, termina con un mate de Ben McLemore (75-81). A la desesperada, Bamforth en el llegar y tirar, la mete de tres. Un nuevo error en el lanzamiento de Robinson, con rebote ofensivo importantísimo de Juan Fernández y dos más para él. Los rojinegros fuerzan la máquina para recortar y falla desde el 6.75, la lucha por el rebote acaba con posesión para los locales. El balón en las manos de Kwan Cheatham y triple del americano (81-83). Una falta personal rápida de los nazaríes para llevar al libre a Sergi García, que no desaprovecha la ocasión con muñeca firme. Menos de un minuto, en concreto, 49.3 segundos. Un nuevo lanzamiento con celeridad de Coviran Granada fallado y en el segundo esfuerzo David Kramer sí acierta el nuevo triple 84-85. El siguiente ataque de Breogán iba casi de la mano con lo que restaba de duelo. Los jugadores de Coviran deciden no hacer falta y los lucenses consumen posesión sin anotar. El tiempo muerto de Pablo Pin no se hace esperar para preparar una última jugada, sólo 1.3 segundos por delante. Saca en campo visitante y Kwan Cheatham es el jugador responsable de lanzar nada más recibir, tras varios bloqueos previos. A la media vuelta, la bola no encuentra aro. El triunfo crucial viaja hasta Galicia para estrechar la zona caliente por la permanencia. Final agónico 84-85 y golpe duro en lo anímico para los anfitriones. El trayecto sigue y restan tres jornadas por delante.

FICHA TÉCNICA

Coviran Granada: Cristiano Felicio (12), Kwan Cheatham (13), Lluís Costa (12), Pere Tomàs (0) y David Kramer (22) – quinteto titular – Malik Dimé (0), Jonathan Rousselle (2), Scott Bamforth (17), Elias Valtonen (4), Christian Díaz (0) y Jacob Wiley (2).

Río Breogán: Ben McLemore (6), Stefan Momirov (8), Sergi García (7), Juan Fernández (12) y Toni Nakic (2) – quinteto titular – Anthony Polite (21), Justin Robinson (15), Matas Jogela (11), Jordan Sakho (1) y Sergi Quintela (2).

Parciales:  18-17, 18-28, 26-21 y 22-19.

Árbitros: Fernando Calatrava, Javier Torres y Alberto Baena. Eliminaron por la comisión de faltas personales al local Elias Valtonen en el minuto 36 de partido.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la trigésimo primera jornada de competición en la Liga Endesa disputado en el Palacio Municipal de Deportes de Granada ante 8283 espectadores, un centenar de ellos seguidores del Río Breogán.